Cuando pensamos en tocar la guitarra, generalmente tendemos a utilizar los mismos acordes básicos una y otra vez. Sin embargo, existen ciertos acordes menos convencionales que pueden darle un toque único y creativo a nuestra interpretación. En este artículo exploraremos cuatro de estos acordes no convencionales y cómo podemos incorporarlos en nuestra música.

1. El acorde de B7sus4: Este acorde tiene una sonoridad muy interesante y puede resultar en una progresión armónica muy emocionante. Para tocarlo, coloca tu dedo índice en la segunda cuerda en el segundo traste, el dedo medio en la cuarta cuerda en el segundo traste, el anular en la tercera cuerda en el tercer traste y el meñique en la primera cuerda en el segundo traste. Este acorde se puede utilizar en lugar de un acorde de B7 convencional para darle un toque más original a una canción.

2. El acorde de Asus2: Este acorde tiene una sonoridad muy abierta y tranquila, y puede ser utilizado como sustituto de un acorde de La mayor. Para tocarlo, simplemente coloca tu dedo índice en la segunda cuerda en el segundo traste, el dedo medio en la tercera cuerda en el segundo traste y el anular en la cuarta cuerda en el segundo traste. Este acorde puede ser utilizado en progresiones más suaves y etéreas.

3. El acorde de Cmaj7: Aunque este acorde incluye una nota extra (la séptima), puede ser utilizado de manera muy efectiva en ciertos contextos. Para tocarlo, coloca tu dedo índice en la segunda cuerda en el primer traste, el dedo medio en la cuarta cuerda en el segundo traste, el anular en la quinta cuerda en el tercero traste y el meñique en la primera cuerda en el tercer traste. Este acorde puede darle un toque de sofisticación a una progresión en tonalidad mayor.

4. El acorde de Dm7b5: Este acorde tiene una sonoridad más oscura y misteriosa, y puede ser utilizado para añadir tensión a una canción. Para tocarlo, coloca tu dedo índice en la primera cuerda en el primer traste, el dedo medio en la tercera cuerda en el segundo traste, el anular en la cuarta cuerda en el primer traste y el meñique en la segunda cuerda en el segundo traste. Este acorde se puede utilizar en progresiones más complejas y armónicamente interesantes.

En conclusión, incorporar acordes no convencionales en nuestra música puede ser una excelente manera de darle un toque único y creativo a nuestras interpretaciones. Experimenta con estos cuatro acordes y descubre cómo pueden enriquecer tu repertorio musical. ¡No tengas miedo de explorar nuevas posibilidades y encontrar tu propia voz musical!