Cuando se trata de tocar solos en la guitarra, a menudo caemos en la trampa de quedarnos en la tónica de la canción. Si bien es importante saber en qué tonalidad estamos tocando, a veces puede resultar monótono y predecible si siempre estamos regresando a la misma nota de base.

Para darle una nueva sonoridad a nuestros solos y evitar caer en la monotonía, es importante explorar otras notas y escalas que se ajusten a la tonalidad de la canción, pero que nos ayuden a salir de la zona de confort de la tónica.

Una forma de hacer esto es incorporar notas de paso, que son notas que no pertenecen a la tonalidad de la canción pero que suenan bien cuando se usan con las notas correctas. Estas notas de paso pueden añadir textura y profundidad a nuestros solos, creando una nueva sonoridad que puede ser más interesante y emocionante.

Otra técnica que podemos utilizar es jugar con escalas modales. Por ejemplo, si estamos tocando en la tonalidad de Do mayor, en lugar de quedarnos en la escala diatónica de Do mayor, podemos probar a incorporar la escala de Do dórico o Do mixolidio. Estas escalas modales le darán a nuestro solo un giro inesperado y fresco, evadiendo la tónica pero manteniendo la coherencia con la tonalidad general de la canción.

También podemos experimentar con doblar notas, utilizando bends, slides y hammer-ons para crear una nueva dinámica en nuestros solos. Estas técnicas pueden añadir emoción y personalidad a nuestra interpretación, haciendo que nuestro solo se destaque y sea recordado.

En resumen, para darle una nueva sonoridad a nuestros solos evadiendo la tónica, es importante experimentar con notas de paso, escalas modales y técnicas de interpretación. Al salir de nuestra zona de confort y probar nuevas ideas, podemos llegar a descubrir sonidos únicos y emocionantes que elevarán nuestro solo a un nivel superior. ¡Así que no tengas miedo de explorar y experimentar en tus solos para encontrar tu propio estilo y sonoridad!